Aysén territorio sin fiscalización y orden ambiental

Por Andrés Gillmore

Aysén esta acongojado, triste y ensimismado con los suceso acontecidos en la Mina Delia 2 de la Minera Cerro Bayo en la Laguna Verde en el sector de Fachinal en la comuna de Chile Chico; que tiene a Enrique Ojeda y Jorge Sánchez atrapados, sin que hasta ahora se haya tenido éxito en el rescate que todos esperamos con tanta ansiedad y muy especialmente en la comuna de Chile-chico. Comuna de 5 mil habitantes, donde prácticamente nos conocemos todos.

Lo ocurrido sea cual sea el desenlace, debe obligarnos a hacer una profunda reflexión y entender que la emergencia bajo todo punto de vista pudo haberse evitado, si los que tenían que fiscalizar lo hubiesen realizado como corresponde. Una vez más constatamos, que las empresas extranjeras (en este caso Canadiense) se permiten hacer en nuestros territorios lo que no pueden hacer en sus países de origen. No creo que en Canadá, la Mandalay Resources la empresa dueña de Cerro Bayo, les permitieran intervenir una laguna como la Verde y explotarla con tan mala seguridad para sus trabajadores y destruirla medioambientalmente como lo han hecho. El refugio de seguridad que se suponía tenia comunicación con el exterior y debía ser hermético, cuando se interviene el subsuelo de una laguna como la Verde, con un subsuelo poco consistente y tan gredoso como el del sector de Fachinal no estaba en esas condiciones y pudo haber representado la gran diferencia.

Las empresas transnacionales se allegan a Chile, porque saben que las fiscalizaciones son esporádicas, que los contratos pueden ser exigentes en el papel y aunque esta la obligación de hacer EIA (Estudios de Impactos ambientales) saben que todo es muy manipulable, que todo es negociable y los que deben fiscalizar suelen dejarse estar. En Chile llamamos desarrollo cuando empresas foráneas explotan nuestros recursos naturales. Pero no es más que crecimiento de los intereses de la empresas en sus países de origen que les permite enriquecerse, burlando protocolos de seguridad, ahorrando en condiciones de trabajo que deben exigirse, pagando sueldos comparativamente muy bajos y destruyen el medio ambiente que no es de ellos, llevándose la riqueza fuera del país, aportando muy poco para el desarrollo de la comuna intervenida. Si la minera Cerro Bayo cerrará mañana su explotación en Laguna Verde; Chile Chico quedaría más pobre, con la tremenda pérdida de no haber podido administrar mejor sus recursos naturales, con un serio problema ambiental y con serios problemas sociales en la comuna y su problemática.  

Personalmente desde mi secretaria y vocería desde la Corporación Costa Carrera (deje de serlo en el 2013) desde el año 2006 que vengo denunciando los malos manejos de la Minera Cerro Bayo, por atentar en contra de los intereses ambientales y sociales de la comuna de Chile Chico, principalmente por el tema de la intervención de la Laguna Verde, transformada en pozo de relave y contaminando todo el sector, de una laguna que tuve la suerte de conocer en el año 1985, cuando era un lugar maravilloso y lugar de llegada en primavera de Flamencos rosados, cisnes, patos, avutardas y caiquenes, de gran belleza escénica y natural para la comuna.

Finalmente realice dos denuncias por el tema. La primera fue vía la página web de Sernageomin en el año 2011 desde Corporación Costa Carrera. Posteriormente al visitar la Laguna Verde el verano del 2014 y constatar que el estado de la Laguna estaba peor y tomar algunas fotos en terreno. Volví a realizar una denuncia en Sernageomin y esta vez la realice con más detalles. Con fecha 2 de marzo del 2015 y en forma personal con mi cédula de identidad, puse el denuncio en contra de la empresa minera Cerro Bayo Mining Corporation, en la Oficina de Comunicaciones de Sernageomin, donde explicó que la minera ha intervenido la Laguna Verde, construyendo un depósito de relaves y un dique de cola y que probablemente estaba contaminando la laguna y las aguas del lago General Carrera y que todas las localidades de la costa del lago Carrera podrían estar comprometidas, al extraer sus aguas para consumo domiciliario desde el lago y que además es un lago binacional compartido con Argentina, que de seguir interviniendo la laguna y contaminando el lago General Carrera, la destrucción de la laguna con el pasar del tiempo seria total. Ahora la laguna Verde desaparecerá para siempre, ya que será vaciada totalmente para intentar el rescate por esa vía.

Como respuesta a mi denuncia, recibí de Sernageomin un documento de cuatro carillas a mi correo electrónico, del cual presento un extracto: “El Depósito de Relaves Fachinal está en operaciones desde el año 1995  y su funcionamiento dispone de todos los permisos y autorizaciones que la normativa vigente exige. Esto es, cuenta con la resolución de calificación ambiental favorable y todos los permisos sectoriales correspondientes, entre ellos el permiso de Sernageomin que autoriza su diseño, construcción y operación, esta de acuerdo a lo establecido en el DS 248. El depósito de relave fachinal de la Cía Minera Cerro Bayo cuenta con todos los permisos necesarios para operar y ha sido fiscalizado por Sernageomin” El permiso fue otorgado en 1995 y mi denuncia fue realizada 20 años después y eso le bastaba a Sernageomin para haber fiscalizado y haber parado la intervención, tanto en superficie como subterráneamente y se dejó hacer y ahora sufrimos esas consecuencias.

Uno de los mayores problemas que tiene Aysén en la actualidad, es que se carece a todo nivel, de educación ética y ambiental con sentido social. No se esta entendiendo lo que es trabajar por una proyección regional sustentable, en una región que tiene como valor agregado su denominación ambiental y escénica de orígen y que en la actualidad las actividades productivas están desvirtuando la proyección de desarrollo. Incluso la actividad turística que es tan noble por lo demás, esta cometiendo errores de diseño y desarrollo por la autoridad, al no hacer estudios de capacidades de carga en la actividad. En todos estos años ningún Diputado, Senador, Alcalde, Gobernador o Intendente, ha fiscalizado las actividades productivas que se realizan en Aysén y no solo en el caso de la minera Cerro Bayo o de la Minera Toqui, que ha contaminado con plomo y arsénico las aguas del río Mañihuales. Esto también esta ocurriendo en la salmonicultura, la pesca industrial y los problemas que se están suscitando al medio ambiente son gravísimos para la proyección del futuro regional.

Existen intereses que quieren desarrollar proyectos en Aysén muy destructivos, que de concretarse podrían hacer ver el accidente en Laguna Verde como juego de niños, si no ponemos cuidados en las formas, los protocolos y las fiscalizaciones. La Central Energética Cuervo en el municipio de Puerto Aysén de Energía Austral, quiere construir una gran represa interviniendo los ríos Cuervo y  Blanco, proyecto emplazado en una falla geológica de gran magnitud como la Liquiñe-Ofqui a 500 m.s.n.m. con un enorme riesgo para la seguridad física de Puerto Aysén y se ha permitido la manipulación del estudio de impacto ambiental y Sernageomin lo ha avalado para aprobar la intención. Lo mismo sucede con los intereses de Enel Italia, dueña en la actualidad de los derechos de HidroAysén. Que ha estado moviendo cielo y tierra y todo el lobby posible en el gobierno y en el Congreso, para intervenir los ríos Baker y Pascua y destruirlos con su proyecto energético para vender energía a la Argentina y Perú y de la misma manera como ocurrió con Central Cuervo, se ha manipulado el EIA para llevarlo a cabo. Aysén se esta transformando en un territorio sin ley y orden en materia ambiental.

Las sociedades desarrolladas entendieron hace rato, que deben relacionar desarrollo con el medio ambiente y darle proyección social. La educación ambiental y la ética del ser y del saber, es la esencia de la proyección de una región como Aysén, que depende de su manejo ambiental y escénico para hacer desarrolló. La proyección del territorio aysenino, debe estar íntimamente relacionado con su aspecto social y cultural, para proyectar solidaridad en sus procesos ecológicos, económicos y sin olvidar su historia.

La conciencia de los valores éticos y morales con que fundamentamos las actividades productivas en una región con las características sociales, ambientales y escénicas de Aysén, deben ser esenciales para la sustentabilidad regional, para crear armonía con el prójimo colectivo, asumiendo que el ambientalismo social es imprescindible para mejorar las relaciones con el medio-territorial, social y cultural. Una región educada ambientalmente, será siempre sinónimo de desarrollo y contará con proyección de futuro, al ejecutar procesos, protocolos, reglamentos y las fiscalizaciones que sean necesarias, para que los procesos productivos sean sustentables y con compromiso colectivo.

En la mayoría de las definiciones donde encontramos el concepto de sustentabilidad productiva, esta unido a ecología y socialización. Es decir: que desarrollo no cause cambios destructivos, irreversibles y radicales en los ecosistemas, no afecten los procesos de carga, bajo modelos de sustentabilidad propia y reconocible socialmente, que asegure la proyección de futuro, la equidad y el balance entre la extracción y el mundo social.

El reto de una producción sustentable en una región como Aysén, esta en la capacidad de ejercer una relación armónica de los modelos productivos, sin trastornar las capacidades de carga y sin descomponer los territorios. El principal objetivo de una productividad sana, esta en que debe tener la capacidad de darle un uso óptimo a los recursos, en términos sociales, naturales y ambientales, elementos fundamentales para mantener los procesos, proteger la diversidad biológica y la autenticidad sociocultural de los territorios de un Aysén Reserva de Vida.